El embajador de España en Paraguay, Juan Fernández Trigo, ha afirmado recientemente que la inversión es Paraguay es interesante por varios motivos.
Según Trigo, “hay que distinguir dos cosas: lo primero es que Paraguay es en estos momentos un país que está despegando, que tiene una serie de condiciones que le hacen atractivo para llamar a inversiones extranjeras y por el otro, porque ha tenido unas tasas de crecimiento muy altas en los últimos años, lo que hace que haya posibilidades de ejecutar un trabajo, lo que lo convierte en un mercado interesante”.
No en vano, Paraguay cuenta con uno de los índices de estabilidad monetaria y fiscal más altos de América Latina y con una de las menores tasas de impuestos. Además, también beneficia a la inversión extranjera la simplicidad del sistema fiscal.
Además, existe una política de apoyo al inversor, sustentada sobre atractivos regímenes para maquila, zonas francas y amplias exenciones fiscales a la inversión.
Cabe reseñar otras ventajas, como el relativamente bajo costo de los recursos humanos y la excelente relación costo-beneficio de la mano de obra. La población paraguaya es mayoritariamente joven y con gran facilidad de aprendizaje.
Otra ventaja de invertir en Paraguay es la abundante disponibilidad y el buen precio de la energía eléctrica. Y también hay que considerar el buen clima, la abundancia de agua y tierras fértiles para la Agricultura, y la ausencia de desastres naturales.
La economía paraguaya se basa en la producción de alimentos, área de fuerte crecimiento. En base a ella, empresarios españoles en invierten en ese país especialmente en ganadería y agricultura, además de en el sector inmobiliario.
